Úbeda es desde el años 2003 Patrimonio Cultural de la
Humanidad pero desde hace ocho ediciones, la ciudad tiene a gala tener como
Patrimonio cultural de Andalucía, España y la Humanidad un Certamen
Internacional de Novela Histórica del que sentirse orgulloso.
Quería haber publicado esta entrada antes pero tengo que
reconocer que me ha costado asimilar todo lo vivido durante tres días en un
certamen que no me duele decir que es todo un lujo para los amantes de la
historia.
Este año cumple su octava edición y al paciente se le ve con
una salud de hierro y con un futuro prometedor porque se palpa que Úbeda está
orgullosa de su certamen y que lo
respalda a nivel institucional y personal con el calor humano y el cariño que
le ponen todos los que lo hacen posible.
Buen motivo o escusa es aprovechar el Certamen para hacer un
poco de turismo como yo hice la mañana del viernes. Paseo guiado por sus
iglesias, sus palacios y sus edificios emblemáticos situados en el casco
antiguo. Una ciudad llena de historias y curiosidades que sin lugar a dudas no
defrauda al conocerla porque tiene ese encanto especial que da pasear por su
casco histórico.
Llegada la tarde del viernes
el Certamen comenzaba con dos presentaciones en la librería Libros Prohibidos
donde Pedro Uceda presentó Historia de una flor de la escritora
Claudia Casanova. Una historia inspirada
en un personaje real pero llevada a la
ficción. Ambos participantes hablaron sobre el libro, el personaje, la época y
todos disfrutamos en su parte final cuando Claudia nos contó detalles de su
labor como editora para la editorial Ático de libros.
A continuación le tocó el turno a Eva María, presentando al
escritor canario José Zoilo y su
trilogía de Las cenizas de Hispania, quien relató su andadura hasta publicar
con una gran editorial y el proceso de creación de sus tres novelas.
Divertidas, amenas y sobre todo interesantes estas dos
presentaciones que daban el pistoletazo de partida a un certamen donde el tema
de la figura de la mujer, los antiguos imperios, las expediciones y las
aventuras tenían su sello destacado en las distintas mesas literarias.
El sábado fue un día de emociones fuertes. A las 10:15 tenía
lugar la presentación y entrega del Premio de Novela Histórica Ciudad de Úbeda,
que recayó en Alan Pitronello por su novela La segunda expedición. No
olviden ese nombre porque dio un discurso soberbio en contra de la leyenda
negra que crítica la colonización española
en América. Su libro tiene olor a aventuras añejas como las de antes así que
espero poder pronto una entrada hablando sobre él.
Tocaba el turno de Pedro
Santamaría y su novela El ateniense, que narra la vida de
Alcibíades, un personaje que ante las
palabras del autor, a los allí presentes nos pareció una figura muy atractiva
de conocer. El personaje me resultó intrigante y sin lugar a dudas me dejó con
ganas de adéntrame en las páginas del libro del autor cántabro para conocerle.
Después de El Ateniense pudimos contar con un escritor con
una trayectoria internacional reconocida y contrastada como es Simon
Scarrow, cuya presencia junto con la de Ben Kane y Baptiste Touverey,
dejan una muestra la categoría y lo acertado del título de Certamen internacional
de novela histórica. Scarrow se mostró muy cercano y en todo momento hizo gala
de un humor muy británico durante su charla.
Simom Scarrow y Ben Kane con un servidor |
Llegado el mediodía el Certamen se trasladaba a la calle,
concretamente a la Plaza Vázquez de Molina donde tuvo lugar la recreación de la
batalla de Isandlwana, entre las tropas británicas y las zulúes. Este año se ha
elegido este suceso con motivo del 140 aniversario de dicho enfrentamiento,
donde el ejército británico sufrió su primera gran derrota ante una fuerza indígena
de tecnología y armamento inferior. Fueron momentos muy vistosos donde el público
se lo pasó en grande y se pudo ver con todo lujo de detalles el mimo y la
precisión con la que los integrantes del ejército británico estaban
caracterizados de la época y actuaban en la representación.
Por la tarde tuvimos la suerte de poder asistir a la charla
de Ben Kean, muy bien presentado por Yolanda Rocha, que nos habló de su novela
Guerra de Imperios, una obra muy original porque apenas hay novelas que
reflejen los contactos entre el mundo militar romano y el griego. Muy sincero,
directo y divertido fue el autor irlandés nacido en Kenia que dejó algunos
momentos fabulosos para la carcajada general del público.
Muy esperada era la presencia del autor francés Touverey,
que con su novela Constantinopla, ha conseguido muy buenas críticas y reseñas en
el mundo literario, teniendo en cuenta que es su primera novela. Demostró que
siente pasión por ese periodo histórico y que lo va a seguir demostrando pues
su novela apunta a convertirse en saga.
Al día siguiente y en una última jornada que la lluvia
ensombreció un poco al no poder realizarse algunas de las actividades al aire
libre que estaban previstas, el certamen se despidió con dos citas muy interesantes que pusieron broche el broche
a las mesas literarias. En primer lugar Iñaki Biggi recibió por su novela
Vakirias, el Premio Los cerros de Úbeda 2019, una autentica novela de
aventuras vikingas en tierras hispanas de la que charló con el también escritor
Emilio Lara.
La última mesa fue para los escritores Emilio Lara y Sebastián, moderada por el periodista Jesús Fernández
que desgranaron la novela del primero titulada Tiempos de esperanza,
novela que recibió este año el Premio Edhasa de Narrativa Histórica.
Un certamen que ha durado desde el 12 de Noviembre hasta el
17 de Noviembre y por lo que además también han pasado autores como Francisco Narla que presentó su nueva
novela Fierro, la autora Mercedes Santos con Sitiados,
el actor Carlos Bardem con Mongo
Blanco y Julio Alejandre con otra novela de viajes y aventuras como es Las
islas de Poniente, finalista del Premio de Novela Histórica Ciudad de Úbeda
del año pasado.
Hasta aquí una pequeña crónica de un gran fin de semana.
Poco a poco os iré relatando más detenidamente y con todo lujo de detalle todo
lo que antes os he narrado.
Un verdadero placer y
privilegio poder asistir a este evento, conocer a los autores, blogueros, periodistas y compartir mesa,
charla y paseos por las calles de una magnifica ciudad que invita a volver
porque uno desde el primer momento que la conoce ya forma parte de ella.
Gracias por la crónica. Me alegra que lo pasaras tan bien.
ResponderEliminarTengo debilidad por este premio porque mi familia paterna es de Úbeda y es un sitio al que le tengo mucho cariño.
ResponderEliminarMe quedo de seguidora y te invito a que te pases por mi blog si te apetece. Puedes hacerlo a través de mi perfil.
Un abrazo.
La verdad es que a mi también me costó mucho asimilar todo lo vivido. Han sido unos días donde te llovían las sensaciones y lo has transmitido estupendamente.
ResponderEliminarUn beso.
Una gran experiencia en la que primó la cultura pero que a la vez fue increíblemente divertida como refleja muy bien tu crónica y, además tuve la suerte de conocerte en persona. Qué más se puede pedir. Besos
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