Hay lugares, personas y libros que se prestan a combinarse
de tal manera que disfrutar de esos momentos que nos otorga la susodicha oportunidad
son de obligado cumplimiento. En una casa palacio, entre buena sombra que invite a la conversación y con un libro tal que “Un asunto
demasiado familiar” y en compañía de Rosa Ribas no pasan los minutos, el tiempo
se detiene y uno se deja llevar hasta que despierta de ese sueño que nunca
quieres que acabe porque la entrevista llega a su fin.
Con aire de ciudadana del mundo, aún le acompaña cierto
acento de su tierra aunque lleve veintiocho años lejos de ella. De discurso
moderado aunque con las ideas muy claras, Rosa Ribas habla de su última novela
con orgullo de madre. Una novela con mucha intriga, mucha reflexión y que según
como la miremos nos puede parecer mucho más cercana de lo que podría parecer en
un principio. Un misterio que al abrirlo nos descubre otros que poco a poco se
van adueñando del protagonismo de la novela. Esos secretos o asuntos internos
que cada familia tiene de puertas para dentro. Magnifica la novela, magnifico
su estilo y el tempo con que Rosa nos va regalando cada frase, cada escena.
Alimenta al lector con la dosis precisa para no empacharnos y que en cada
momento tengamos ganas de más.
Hay recomendaciones literarias que a uno le gustaría que le
tomaran en serio y esta es una de ellas.
La agencia de detectives de Mateo Hernández tiene su sede en una céntrica calle del popular barrio barcelonés de Sant Andreu. Allí, junto a Mateo, trabajan sus hijos Marc y Amalia, y un asistente, Ayala, encargado de los trabajos más sucios. A veces, además, colabora de una forma peculiar Lola, la mujer de Mateo, cuyas intuiciones sobre los casos suelen ser desconcertantemente certeras. Hasta hace unos meses también formaba parte del equipo Nora, la hija mayor del matrimonio, pero en la actualidad se encuentra en paradero desconocido; una preocupación que, como un silencioso cáncer, está erosionando la convivencia de la familia… y de la empresa. Un día se presenta en las oficinas de la agencia Carlos Guzmán, un constructor muy poderoso, conocido y temido en el barrio a partes iguales. Guzmán encarga a Mateo que encuentre a su hijo, desaparecido desde hace días, y quién sabe si por culpa de los turbios negocios del padre. La investigación va a revelar los vínculos inesperados entre los personajes, los pasados compartidos y las historias secretas que arrastra cada clan… Y de esta forma, una desaparición nos llevará a otra. Y un fascinante paisaje humano seducirá al lector a primera vista.
Libros en el petate: Rosa en tu haber hay unas trece novelas
y algún que otro libro más. Con semejante bagaje ¿se hace complicado encontrar
historias?
Rosa Ribas: Por suerte para mí no. Si algo se me hace
complicado es encontrar tiempo para contar todas las historias que tengo
pendientes. He empezado tarde a publicar y a escribir con dedicación completa y
me he dado cuenta que se me acumulan las historias y que cada historia te
sugiere otra y otra mientras vas acumulando libretas con cosas que te gustaría
escribir, así que de momento no y espero que nunca.
L.P: Una nueva novela de detectives. Entiendo que lo tuyo
con este género es pasión pero de dónde le viene a Rosa Ribas.
R.R: Pasión o adicción (risas). No sé de donde me viene pero
desde luego no puedo negar que hay una afinidad gracias a todo lo que me
permite contar a través de este género y no por un interés morboso por el
crimen. Son estas historias donde ocurre un suceso muy duro las que dan pie a
contar historias que son más importantes. El género negro es muy flexible y
facilita muchas opciones a la hora de mezclar elementos, estirarlo todo lo que
quieras o romperlo en cualquier punto que al tener unas bases muy claras y
reconocibles, el autor siempre lo encuentra.
L.P: Hablemos un poco sobre su título, “Un asunto demasiado
familiar”. A medida que uno va leyendo se va dando cuenta que el barrio donde
se desarrolla la trama es como una gran familia. Me equivoco.
R.R: Efectivamente, no te equivocas pues Mateo el protagonista
tiene la agencia de detectives en un barrio donde conoce a todo el mundo y es
un ambiente muy familiar. Por el contrario, a su hija Amalia le encantaría que
la agencia estuviera en un barrio más céntrico pero su padre piensa en lo
importante que es para el negocio saberlo todo de todo el mundo.
L.P: Esta novela es un drama muy duro que se suaviza con
cierto humo y la trama detectivesca y eso me ha llamado la atención, la manera
de expresar un drama de forma tan natural.
R.R: Lo que quería contar es la historia de una familia muy
complicada, con unas relaciones familiares complejas y sobre todo cuando en el
centro de esa familia hay una madre con problemas de un desequilibrio psíquico grave.
Lo de convertirlos en detectives fue una idea que vino a posteriori para darles
el tejido de que sean ellos justamente por profesión y por vocación los que se
dediquen a desenmascarar los secretos ajenos teniendo precisamente cada uno de
ellos una historia familiar cargadísima de secretos. La capa esencial es la de
la familia y la secundaria la de los detectives.
L.P: Reconozco que he ido disfrutando con cada página,
porque es poco a poco y página a página como vas facilitando la información sobre
la vida de estos personajes haciendo la novela mucho más interesante. Todo este
entramado ya estaba en tu cabeza o ha ido surgiendo a lo largo del desarrollo
de la idea principal.
R.R: Un poco de las dos cosas. Tengo que saber a dónde voy
porque es mi forma de trabajar pero no quiero saberlo todo porque eso me quita
las ganas de escribir. No es un trabajo como el de los guionistas que tienen
que saber todo lo que va a ocurrir para ir montando las escenas. Me gusta tener
una historia básica y a medida que escribo van pasando otras cosas y a veces la
historia que tenías en tu cabeza puede variar y se van añadiendo detalles como
personajes completos que no estaban en el plan original.
L.P: “Un asunto demasiado familiar” se desarrolla en un
barrio de Barcelona. Uno de esos lugares que originalmente eran un pueblo y que
la ciudad los anexionó como barrio al ir creciendo poco a poco. Viviendo desde
hace tanto tiempo en Alemania por qué escoges un escenario como este.
R.R: Por dos razones. La primera es que quería que fuera un
barrio-pueblo porque yo vengo de una ciudad pequeña donde nos conocemos todos y
la segunda que he descubierto estos días a raíz de la promoción y que tiene que
ver con mi nostalgia tras llevar veintiocho años fuera, dándome cuenta que
añoro muchas cosas y escribiendo esta novela me permitía volver a moverme por
Barcelona y era como vivir de nuevo en ella. Me ha permitido volver a una Barcelona
que añoro porque cuando escribes sobre un lugar vives en él ya que caminas por
sus calles, hablas con su gente y era
una manera de quitarme un poco esa nostalgia.
L.P: Una curiosidad. Yo reconozco que esta historia que
cuentas en tu libro podría pasar en mi barrio, pero podría pasar en la Alemania
donde vives.
R.R: Algunas cosas son muy de aquí, son cosas que se
reconocen como españolas o mediterráneas. Si lo hubiera desarrollado en
Alemania si es verdad que hubiera tenido que buscar elementos más propios del
país ya que tienes que ir a la idiosincrasia de cada lugar pero en el fondo en
un barrio puedes representar el mundo entero. Existen en la novela aspectos que son específicos de aquí pero después
podemos encontrar cosas que son muy humanas y esas no cambian de un lugar a
otro ya que son universales. La frase que dice “Háblame de tu pueblo y me estarás
hablando del mundo” es cierta.
L.P: El germen para la creación de esta novela surgió en una
conversación con tu marido mientras paseabais. Puedes contarnos algo más sobre
aquel momento.
R.R: Íbamos paseando cuando le conté a mi marido de que
tenía muchas ganas de escribir una historia familiar que contara como son las
relaciones entre padres e hijos y mientras conversábamos surgió la idea de los
detectives porque me preguntó si no iba a ser policiaca. Hablar sobre
detectives nos llevó a conversar sobre aquella mítica serie de detectives llamada
Remington Steele y fue clave para introducir en la novela a una persona de esa
familia que actuara en la sombra y que diera las pistas decisivas que arrojaran
luz sobre los casos.
L.P: uno cierra el libro y queda muy satisfecho con su
lectura y con ganas de más porque llega un momento en que sin darte cuenta les
has cogido cariño a los personajes y no quieres desprenderte de su presencia.
Yo sé que podría ser una saga.
R.R: Lo será.
L.P: Y esta todo en el aire o hay algo planificado.
R.R: Cuando empecé a escribir esta novela yo pensaba dejarla
cerrada, pero muy cerca del final y cuando me había enamorado de sus personajes
pensé que quería darles más recorrido a la familia Hernández y me planteé una
serie de tres novelas para tener un arco narrativo y7 por eso tuve que
introducir algunos cambios en esta para dejar algunos hilos de los cuales poder
tirar más adelante, aunque por supuesto cerrando y dándole conclusión al tema
principal sobre el que gira esta novela.
L.P: Quiero pensar que este libro tiene cierto propósito de
denuncia sobre ciertos temas sociales.
R.R: No me planteo nunca las novelas como una tesis, no
quiero ni denunciar nada ni protestar por nada pero evidentemente esos temas están
ahí porque si hablas de un barrio actual tienes que hablar de corrupción, de la
explotación de los inmigrantes, la violencia doméstica, el vandalismo, los
robos y ahí en esos temas es clara mi posición respecto a esos temas que son
denunciables.
L.P: Decías en una entrevista que una familia era como una
novela negra y este libro me lleva a la reflexión de que una familia es
perfecta para inspirarse.
R.R: En el fondo si se dice que esta novela es negra es más
porque trata de una familia más que por los casos detectivescos porque lo negro
es la familia no el caso que le encargan. Lo más negro de esta novela está en
la casa, en lo que ocurre dentro de esa familia que es donde encontraremos su
aspecto más oscuro.
L.P: Y si te digo que en algunos momentos me ha importado
más el contenido por lo que cuentas, que la trama en sí.
R.R: Pues me alegro mucho porque eso era lo que pretendía.
Las tramas pueden a veces ser intercambiadas o las puedes resumir en unas
líneas porque eso es lo más fácil de hacer pero lo importante son los
personajes, lo que hacen y lo que te hacen reflexionara ti y de qué manera te
toca lo que les pasa a ellos. Muchas veces recordamos personajes por lo que nos
transmitieron pero hemos olvidado la historia en la que aparecían. Esto no quiere decir que quiera restar
importancia a la trama porque está muy trabajada pero después de la novela uno
recuerda sobre todo a Mateo, a Lola, a Amalia, su mundo, su forma de verlo, su
personalidad y las cosas de las que te han hablado que están fuera de lo que es
la trama pura y dura.
L.P: Como lector invito a todo el mundo a leer tu novela
porque es una historia maravillosa y sus personajes son dignos de conocer. Yo
por ejemplo me quedo con mateo, un personaje que es capaz de reinventarse y que ejerce dentro de la familia como una
especie de salvavidas o mediador al que todos pueden aferrarse o dirigirse
llegado el caso Te pongo en un compromiso y te pregunto si tiene Rosa Ribas
algún favorito.
R.R: Me cuesta mucho decidirme porque son todos mis
personajes aunque te podría hablar de Amalia, que se finge sensata pero que
tiene una rabia en el cuerpo tremenda por todo lo que pasa en su vida, por la
familia que tiene y por toda su frustración y ha sido por todo ello por lo que
me gustaba trabajar con ese personaje.
L.P: Podría decirse que Amalia es un personaje que por su
rol podría tener mucho recorrido en futuras entregas.
R.R: Sí aunque como todos, tiene una cara luminosa y una
oscura, Amalia es muy joven y puede adquirir una gran solidez por lo que está
viviendo y que puede hacer de ella un personaje muy importante. Hay personajes
de los que también se puede contar mucho porque aunque sabemos mucho de sus
historias quedan aún huecos por rellenar en todos ellos.
L.P: Rosa tengo que reconocerte que leer tu novela ha sido
un verdadero placer pero conversar contigo sobre ella mucho más.
R.R: Gracias a ti por tus apreciaciones y tus palabras.
Magnífica entrevista Fernando, es la novela que estoy leyendo en estos momentos, y mañana voy a la presentación que hace la autora en la biblioteca del mismísimo barrio de Sant Andreu. Un abrazo
ResponderEliminarEstupenda entrevista. Y una autora con la que aún no me he estrenado. A ver si le doy una oportunidad pronto.
ResponderEliminarBesotes!!!
Como ya sabes el libro me ha gustado mucho. Me ha encantado leer la crónica del encuentro, siempre a través de las palabras de un autor se descubren cosas sobre un libro que son muy interesantes.
ResponderEliminarBesos
Gracias por la entrevista. Solo leo buenas opiniones de este libro. Yo todavía no lo he podido empezar pero espero poder hacerlo pronto.
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