Hace
unos días os hablaba de mis impresiones sobre “Comer cerezas con los ojos
cerrados”, el nuevo libro del divulgador científico Pere Estupinyá cuya
reseña podéis leer aquí.
Si fue
un verdadero placer leer su libro, poder conversar con él lo elevo a la
categoría de privilegio sin desmerecer anteriores autores.
Pere desprende
ciencia, y la ilusión que pone al hablar de ella reconoce su idilio con la
maeria. Es lo bueno de encontrarte con gente que transmite ilusión en su discurso,
que te contagia de él y puedo asegurar que en mi libreta asomaban unas cuentas
preguntas que se convirtieron en mas a medida que hablaba con el autor.
La
conclusión de mi encuentro es de sorpresa al descubrir en la figura del divulgador científico un imán para atraer a las personas a sus explicaciones. Estupinyà seguirá
robando cerebros y yo espero tener la oportunidad de volver a cruzarme con él y catar un poco de esa experiencia suya de tratar con autenticas eminencias. De momento me quedo con su entusiasmo en el trato y en su exposisicón durante la conversación.
A continuación lo tratado en dicho encuentro.
Libros
en el petate: Pere viendo un poco lo que se dice de ti, divulgador científico,
biólogo, escritor y otros tantos más. Llegas en algún momento a saber quién
eres.
Pere
Estupinyà: Si, al final cuando eres freelance te toca ser y hacer de todo
aunque profesionalmente si que soy muchas cosas, a nivel personal bioquímico y
biólogo soy de formación. A veces me presentan como científico y me resulta
extraño porque yo no me dedico a la ciencia. Divulgador es un término medio que
encaja bien en la definición o podríamos llamarlo comunicador científico.
L.P: En
tu libro dices que la ciencia es un sexto sentido pero yo al leerlo e
interpretarlo creo que ese sexto sentido no crees que podría ser la imaginación
al fin y al cabo.
P.E:
Hay un matiz diferente, la imaginación se genera dentro del cerebro y el
sentido es algo que viene de fuera, aunque tu punto de vista es comprensible
pero siendo estrictos en la terminología
sentido es algo que se produce desde fuera y yo hablo de la ciencia como
sentido porque te permite ver una información que está en la naturaleza, las
conexiones y las relaciones entre fenómenos.
L.P: Te
lo comentaba porque en tu libro hablas de la imaginación como factor importante
para buscar respuestas y preguntas en la ciencia y en la vida.
P.E: La
imaginación genera hipótesis y trabajan en conjunto con la ciencia. Esta sin
imaginación sería absurdo, la ciencia son experimentos pero deben tener una
hipótesis de partida y es la imaginación quien la crea.
L.P:
Invitas a realizar un tour por la ciencia a través de tu libro. Hay que
preguntarte por qué en estos ámbitos la gente tiene tanto miedo a acercarse a
la ciencia.
P.E:
Porque es un lenguaje diferente, el lenguaje en que trabajan los científicos es
más inaccesible y eso genera rechazo y luego la ciencia no es tan satisfactoria
para el público en general ya que esta es cauta, uso mucho el rigor, el
cuestionarse constantemente y todo esto no es tan atractivo como los resultados
inmediatos y ello juega en contra de la ciencia. La mayoría de la gente sólo ha
tenido la exposición a la ciencia que tuvo en la escuela y al pensar en ciencia
lo hacen recordando el colegio y eso era un coñazo y la culpa en gran medida de
que la ciencia no tenga una buena precepción social es del tipo de enseñanza
que se imparte en las escuelas. Esto es una desgracia, asocian ciencia con
matemáticas, física, química sin haber tenido acceso a otro tipo de ciencia que
es mucho más interesante y todo es responsabilidad del sistema educativo.
L.P:
Para hablar de ciencia hay que tener en cuenta las mentes cerradas. Cuanto
crees que tardara en abrirse la sociedad a la ciencia.
P.E: Yo
creo que el proceso en el que vamos teniendo más información es creciente y utilizamos
esta información para ser más sabios aunque esto último no tiene porque ser
necesariamente creciente. (Tú puedes tener más información pero utilizarla para
defender tus creencias y no necesariamente para aprender algo nuevo).
Es
interesante conocer que tenemos mejores escuelas y mejores medios de
comunicación, las dos vías donde la gente se informa y si se fomenta el
pensamiento crítico la gente abrirá su mente.
L.P:
Esto me lleva a pensar que el talento de aquí esta desaprovechado y pongo como
ejemplo llamativo el de Rafael Yuste del que hablas en tu libro.
P.E.:
Es un buen ejemplo, un hombre que tuvo una brillante idea y la diferencia es
donde tuvo esa idea. El estaba en un entorno en que a esa idea se suma gente,
se pone dinero y se lleva a cabo y aquí hay un entorno en el que no es tan
fácil que las ideas se transformen en proyectos y en este sentido tienes razón
y el talento aquí esta desaprovechado.
L.P:
Influye el lugar donde vivimos y cómo vivimos dices en tu libro para ser como
somos por lo tanto influye donde hemos nacido para la anterior pregunta.
P.E: Si,
la personalidad tiene unos pequeños condicionantes genéticos pero todo lo demás
es adquirido desde las primeras
experiencias vitales por la educación recibida, la cultura que te acoge. La
personalidad no es estanca, aunque si hay unos patrones, luego todo esta
modulado por el entorno, incluso hay modulaciones genéticas provocadas por el
entorno y el tipo de vida que llevas.
L.P:
Todo el mundo te llama “el ladrón de cerebros”, explícanos un poco de donde
viene.
P.E: “El
ladrón de cerebros” es un nombre que inventé yo para definirme cuando estaba en
Harvard entrevistando a científicos y de alguna forma trasladando lo que ellos
hacían a un lenguaje más accesible. Era como robar información de científicos
para compartirla con otros.
L.P:
Los títulos de los libros me provocan mucha curiosidad, tú hablas del cherry
picking en el libro, por qué escoges precisamente ese ejemplo para darle título
hablando de tantas cosas y cualquiera tan válida para formar parte del título.
P.E: A
nivel comercial es un mal título (risas). Es una idea muy personal, la
importancia no esta en la ciencia sino en la interpretación científica de los
datos, en filtrar esos datos y ser objetivos en ese proceso. Con este título
quería dar un pensamiento científico al libro, no tanto de ciencia cool y me enamoré de este concepto de
comer cerezas con los ojos cerrados porque yo creo que el cherry picking es
perjudicial para las personas y la sociedad en última instancia. Hay un mensaje
muy poderoso detrás de este término y con el tiempo se ira viendo.
L.P: Tu
libro me sirve para reflexionar sobre diversos aspectos que hasta ahora los
tenía dados por sentado. Hablas del optimismo para descubrir pero la sensación que tengo es que miramos
las cosas desde un punto de vista cercano.
P.E: No
somos capaces de imaginar por ejemplo la vida más allá de nuestro planeta
porque la única que pensamos es en la que se basa en carbono y bacteriana y eso nos lleva a buscar
lo que conocemos y con este planteamiento se nos escapan muchas cosas.
L.P: Ahí entra el poder de la mente (en tu
libro hay varios capítulos en los que se habla de ese poder). Cuanto crees que
conocemos nuestra mente.
P.E: La
mente entendida como el producto de la actividad neuronal se va entendiendo
cada vez más y sobre todo desde que hay ciencia. La mente ha sido una de las
grandes preguntas filosóficas de la historia y los filósofos han aprendido
mucho sobre cómo funciona la mente y la razón. Ahora con la ciencia estamos
aprendiendo cómo funciona el cerebro, esa máquina que genera una mente y
podemos hacer experimentos más precisos y saber las reacciones que se tienen
según las circunstancias y los momentos. No se estudia la mente en conjunto, se
estudian aspectos concretos.
L.P:
Además de reflexionar sobre aspectos que suelen pasar desapercibidos, me ha
provocado en algunos momentos dudas, provocadas por la acción de pensar. Una de
esas dudas es si existen las verdades absolutas en la mente.
P.E:
No, dentro de un modelo puedes establecer que dos más dos son cuatro y dentro
del universo matemático eso es una verdad absoluta pero al final están basados
en un conocimiento cada vez mayor pero realmente limitado por nuestros sentidos
en un espacio temporal. No tiene porque ser absoluto más allá de lo que somos
nosotros. Tenemos unos límites y dentro de ellos creamos unos modelos que
encajan pero absoluto dentro de nosotros no.
L.P:
Reconozco que te ha salido un libro muy positivo porque es asombroso todo lo
que se explica en ese libro teniendo en cuenta lo minúsculo que somos
comparados con el universos. A pesar de que sabemos que existe un gran
desconocimiento de muchas cosas el ser humano no para de mirar más lejos cada
vez aunque aún no haya sabido explicar circunstancias más pequeñas.
P.E:
Esto es muy común porque la ciencia esta tan compartimentada que se generan a
veces estás incoherencias. Una rama de la ciencia avanza mucho en una dirección
y otra no tanto y te preguntas como puede ser. Me gusta tu observación y si la
reflexiono puede ser cierta pero no está el libro pensado en ese camino.
L.P: Hablas de cómo influye toda esta ciencia en la
sociedad y leyendo uno de los pasajes de tu libro en el que hablas de un
veterinario y sus prácticas no muy legales te pregunto si hay mucha estafa en
la ciencia.
P.E: Si y esta cuantificada. Hay mucho fraude ciencitífico
y muchas publicaciones manipuladas, datos falsos. La ventaja de la ciencia es
que se va autorregulando, es decir, tu puedes inventarte unos resultados y
publicarlos pero la comunidad científica los toma con cautela hasta que alguien
lo replica (hacer los mismos experimentos y que den los mismos resultados) y
entonces confirman que es verdad. El problema es que hay muchos estudios que no
se replican.
L.P: Esto me lleva a preguntarte si con tu experiencia en
el campo y todas las conversaciones y temas que has tratado has encontrado
mucha leyenda urbana en este mundo.
P.E: Absolutamente, se cuentan muchas historias. Hay una sabiduría
popular que se fomenta y que en algunos casos está muy bien pero en general la
ciencia no investiga en cosas superfluas, es dinero público que se debe
invertir en cosas más trascendentales. Nos fiamos mucho de la sabiduría popular
y a la ciencia la miramos con distancia y no debería ser así.
L.P: En tu libro hablas de la doctora Laura Sandy, ella
estudia un tema de actualidad como es el estrés. Viendo los estudios que se
realizan y la realidad social uno tiene la sensación de que hay muchos estudios
y pocos se llevan a la práctica en la sociedad.
P.E: No es tanto el caso de la doctora Sandy pero si en
otros casos. Creo que el científico está demasiado desligado de la sociedad y
se guía por lo intelectual, lo académico en lugar de lo práctico.
L.P: Yo creo que esto llega a desmoralizar un poco cuando
se demuestran con estos estudios beneficios o perjuicios para las personas y
que por no llevarlas a cabo queden en meras estadísticas.
P.E: Hay gente que si aplica estos estudios y esto les
lleva a la afirmación de que conocer ciencia es una ventaja competitiva y te permite
innovar en procesos.
L.P: He disfrutado del pasaje en el que mencionas a
Antonio Damasio. Crees que algún día llegaremos a programar cerebros.
P.E: Programar cerebros ya se hace en educación.
L.P: Yo hablo a nivel de intervención quirúrgica.
P.E: No me extrañaría que a nivel militar se estuvieran
haciendo y experimentando.
L.P: Entonces no son tan descabelladas algunas historias
que vemos en ciertas películas de ficción.
P.E: Por ejemplo para eliminar el miedo, mantener un
cerebro más despierto y en tensión. Lo que ocurre es que si está ocurriendo
esto sería alto secreto y no nos enteraríamos.
L.P: Yo que soy de letras he disfrutado mucho con tu
libro, que le dirías al lector para que se acerque y se sienta atraído por él.
P.E: Hay varias frases que serían buenos eslóganes.
“Conocer ciencia es una ventaja competitiva”, “Mente cerrada es la que cree y
no la que duda”, “Sabiendo ciencia aumentas tu inteligencia”, “La inteligencia
no es una capacidad sino una actitud”. Este trabajo es como un libro de tapas científicas,
es un variado de temas en el que se disfruta de una ciencia variada.
L.P: Viendo tu anterior, este tiene un recorrido más
amplio. No te ha preocupado tratar tantos temas y tan variados.
P.E: En realidad es más fácil. Si coges un único tema,
escribir 300 o 400 páginas es más difícil si lo quieres hacer bien, que tratar
diversos asuntos en esa cantidad de hojas.
L.P: En tu libro dices que somos nuestro cerebro. Qué
salud tiene la humanidad.
P.E: Si lo miras desde una perspectiva histórica cada vez
hay menos pobreza, más gente escolarizada, etc. Como humanidad vamos mejorando
en muchos aspectos pero si hablamos desde el punto de vista de la ecología
tendremos problemas a la larga y por ejemplo en el tema del agua para la
humanidad supondrá una crisis que puede resultar bastante comprometida. En líneas
generales creo que no gozamos de mala salud.
L.P: Pere para mí ha sido un verdadero placer poder hablar contigo.
P.E: Gracias a ti por tus comentarios sobre mi libro me has hecho reflexionar a mi también sobre ciertos aspectos.
Una entrevista muy interesante. Muchas gracias!
ResponderEliminarBesotes!!!
Buena entrevista un beso ;)
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