Hoy os traigo la reseña de una historia que me ha hecho
disfrutar mucho por varias razones. La novela en cuestión se llama A
tumba abierta, y trata sobre un asunto que en estos momentos es rabiosa
actualidad y que está levantando ampollas entre los distintos sectores de la sociedad
implicados, y que no es ni más ni menos, que la exhumación de los restos de
Franco del valle de los caídos.
Una novela tan actual que incluso se narran datos y momentos
que han ocurrido apenas un par de meses antes de la edición y puesta en venta
del libro al público, lo que ya de por sí es muy meritorio y sin lugar a dudas
agradecemos los que nos gustan esos detalles de calidad y de saber adaptar una
novela a su contexto en el espacio del tiempo.
Posee una mezcla de géneros que la hacen más atractiva si
cabe de lo que la trama ya es de por sí. Una lectura ágil, pues abundan los diálogos
que nos llevarán en volandas a través de sus páginas. Interesante por los temas
tratados y el enfoque de los sucesos en los que Alfonso Domingo se basa para
construir su relato harán que sin lugar
a dudas la historia atraiga la atención del lector desde el primer momento.
Resta decir que los ingredientes que dan forma A tumba abierta, tiene la suficiente
fuerza para hacernos reír, reflexionar y por supuesto emocionarnos en más de
una ocasión con ciertos momentos donde el lector no sale indemne de la lectura.
Título: A tumba abierta.
Autor: Alfonso Domingo.
Editorial: Algaida editores.
Año: 2018.
Género: Intriga, Narrativa contemporánea.
Páginas: 295 páginas.
ISBN: 9788491890652
Sinopsis:
De cómo, por una venganza, robaron en secreto el cadáver de Franco ¿Y si, cuando se proceda a exhumar la tumba de Franco, se encuentran el féretro vacío? Esa es la historia que cuenta esta novela, una historia que pone de manifiesto lo que fue el franquismo y ese período oscuro de nuestro pasado más inmediato. Es, asimismo, la historia de la venganza de una víctima de su régimen, una especie de justicia poética que intenta paliar esa anomalía democrática, aunque sea desde el terreno de la literatura, la ficción y el humor. Pudo haber ocurrido. La operación «Chaplin» relata cómo pudo haber sido exhumado en secreto el cadáver de Franco de su tumba del Valle de los Caídos, bajo una losa de tonelada y media, algo que parecería, en principio, imposible o digno de una película de Berlanga. El cerebro de esa operación «a tumba abierta» es un niño robado, que organiza una pintoresca banda que, con algunos avatares, conseguirá su objetivo. Niños robados, prisioneros republicanos cumpliendo condena de trabajos forzados para hacer el mausoleo del dictador, represión hacia los vencidos de la guerra civil, se entremezclan en estas páginas, dignas de un thriller trufado de humor negro, junto a la más rabiosa actualidad. Más de cuarenta años después de que fuera enterrado, al fin Franco salió del Valle de los Caídos.
Impresiones
Se me hace difícil hablar de este libro y mantener un
equilibrio en mi discurso. Sin lugar a dudas la novela en algunos pasajes me ha
despertado muchos sentimientos y
recuerdos de charlas con mi abuelo, aquel militar obligado a luchar en un bando
con el que no compartía ninguna ideología pero que por cosas del destino la
sublevación le pilló en esos momentos, en el cuartel equivocado. Tal vez esta
historia sea una forma de hacer algo de justicia poética para muchos olvidados de
diversa manera y que como bien dice en
mi opinión, el ilustre profesor Comellas, "La memoria histórica la han
aprovechado muchos para reabrir heridas”.
Me reitero en mis comentarios de que la novela me ha
devuelto en muchos momentos recuerdos que han provocado que cerrará el libro y
con la mirada perdida viajará a otros momentos. Por ejemplo a mi paso por la
universidad, estudiando la carrera de Historia donde las referencias de los
profesores a Nicolás Sánchez Albornoz eran obligadas un día sí y otro también. (Esto
lo comento porque Sánchez Albornoz tiene un papel pequeño en la novela pero muy
entrañable y conmovedor). A una canción que se convirtió en fetiche para mí en
aquellos tiempos en los que mi abuelo nos dejó y que yo no paraba de escuchar
honrando su recuerdo. La pieza en concreto se titula “Al bando vencido” del cantautor Ismael
Serrano
“Ni un momento, ni un recuerdo,
para los que perdieron, los que construyeron
la tumba, el mausoleo,
de la miseria, del carnicero.”
"La vida es una canción triste que hay que cantar con alegría. Te prepara para este valle de lágrimas"
“Entonces lloró desconsolado, por ella, por él, por la humanidad
entera, por el pasado y el futuro, por aquel misterio de la vida al que, por
primera vez, se enfrentaba como un huérfano”
El asunto le abruma y le afecta de tal manera que por un
tiempo se abandona a la reflexión, al dolor y es en esos momentos cuando surge
en su cabeza la disparatada idea de encontrar un chivo expiatorio a toda la
rabia que siente y que trata de apaciguar. El personaje en cuestión es ni más
ni menos que Franco. Como jefe del estado lo encuentra culpable de todas las
fechorías que bajo su mandato se consintieron y por ello decide robar su cadáver
del valle de los caídos y darle sepultura en un lugar muy simbólico para él.
Es a partir de estos momentos cuando nuestra historia toma
forma y acompañaremos a Alfredo en la puesta en práctica de su plan y en el reclutamiento
de un variopinto grupo de personajes que conformaran la banda que intentará
perpetrar dicha disparatada aventura.
Personajes que empezando por el propio Alfredo nos va a
resultar un elenco entrañable formado por Rodrigo Martínez, un argentino cuya
idea del delito roza en ciertos momentos el ideal del aspecto puramente romántico
de su trabajo. Un hacker, un abuelo aficionado a la magia y a la
interpretación, una ladrona de guante blanco y un trío de actores en busca de
una oportunidad que les de experiencia en el mundo del teatro formarán una banda con una misión casi imposible y a
la que acompañaremos durante toda la novela para comprobar si serán capaces de
salir bien parados de semejante locura.
En ciertos momentos me ha recordado a esas películas del
estilo “Atraco a las tres” o “Italian Job” pero en versión literaria y aunque
podría pensarse que el asunto es todo un disparate, Alfonso Domingo dota a la
trama y a todo el proceso de cierto componente de lógica, unido a datos y
cuestiones técnicas que ponen en pie los hechos dándole buenas dosis de
credibilidad.
Otro aspecto a tener en cuenta son los temas secundarios que
aborda el autor en su novela. Por un lado el de los niños robados, exponiendo
con datos y testimonios reales un hecho silenciado hasta hace poco pero que se
ha destapado todo un delito de grandes dimensiones. El otro asunto que se
refleja en A tumba abierta es el de los republicanos enterrados en el
Valle de los caídos y que incluso muchos de ellos no están identificados. A
esto se le suma a grandes rasgos como funciona dicho lugar, quien lo protege y
cómo son los encargados de dirigirlo y su funcionamiento.
Todo contado con los suficientes datos para hacernos una
idea y que nos impacte lo suficiente captando toda nuestra atención pero sin llegar
al exceso de datos para no saturarnos en una lectura que pretende ser una
historia con visos de aventura, envuelta en ciertas reflexiones críticas a los
temas que en sus páginas se trata. Es por ello que destaco sobre todo la
capacidad del autor para mostrar una cara muy seria de todo lo que aquí se
narra, contrarrestada por dosis de humor que sin lugar a dudas le confieren un
equilibrio perfecto para que toda la historia se sostenga de forma magistral.
Una obra totalmente recomendable porque a poco que comiences con su lectura, te conviertes en
Alfredo queriendo vengar todas las injusticias que aparecen en ella y de paso
embarcarte en una aventura de película con una conclusión donde el autor deja
un mensaje final que robara más de un suspiro de reflexión.
Autor:
En 2006 dirigió La memoria recobrada, una serie de cinco capítulos, en coproducción con TVE. Dirigió en 2009, Sahel, nuestra rivera y Bajo todas la banderas, españoles en la segunda guerra mundial. En 2016 dirigió Melchor Rodríguez, el ángel rojo, galardonado con el segundo premio del concurso Imaginera del Centro de Estudios Andaluces.
Ha publicado ensayos como El canto del búho (2003), Retaguardia (2004), La serpiente liquida (2005).
Su primera novela, La madre de la voz en el oído, ganó el Premio Feria del Libro de Madrid (1991), La estrella solitaria (2003) obtuvo el VII Premio de Novela Ciudad de Salamanca. Con El espejo negro ganó el Premio Ateneo de Sevilla en 2011 y con El enigma de Tina logró El Premio Ateneo Ciudad de Valladolid. En 2014 publicó La balada de Billy el Niño.
No es mi género predilecto ni tampoco un tema que me llame, pero reconozco que tiene mérito por parte del autor actualizar su trabajo tanto y ajustar su historia.
ResponderEliminarUn abrazo.
http://milirio.blogspot.com/
Te entiendo en lo que dices de los recuerdos, me pasó con La noche que nunca paró de llover de Laura Castañón. Y sí, tienes que parar de leer porque la emoción...
ResponderEliminarDe todas formas este tema por ser tan actual no me llama, al menos hasta que se resuelva el asunto.
Pues pinta muy bien! No me importaría leerlo =)
ResponderEliminarBesotes
Qué bonita reseña! Ya tenía fichado este libro pero ahora me confirmas que no tengo que dejarlo pasar.
ResponderEliminarBesotes!!!
La leería, sin duda alguna. Tomo buena nota de lo que nos comentas sobre esta novela. Un abrazo.
ResponderEliminarQué original el libro y que de rabiosa actualidad, por cierto me encanta Ismael Serrano. Creo que es un homenaje de alguna manera, como dices, a todos los que sufrieron aquello. Un abrazo
ResponderEliminarAl principio no me llamaba, pero tras leerte me ha picado la curiosidad. Voy a indagar un poquito :-)
ResponderEliminarBesos.
Lo disfruté mucho. Me pareció muy actual.
ResponderEliminarDesde luego, actual es. No lo conocía. No lo descarto, no. Un besote!
ResponderEliminar¡Hola! Pues me gusta mucho todo lo que cuentas. Y me parece muy interesante y original el tema para una novela, aunque últimamente no se oiga hablar de otra cosa. Es muy probable que acabe leyéndolo, por cambiar un poco de género
ResponderEliminarBesos