Pasan algunos minutos de las 20 horas cuando Andrés Neuman con cierto retraso (hora exacta de llegada) hace acto de presencia, tranquilo, con una sonrisa (acorde mayor) que parece no abandonar nunca. Me quedo mirando, él no me conoce, pero se percata de ello, me dedica un guiño cómplice y me ofrece su mano. Hechas las presentaciones se abandona por el local saludando y haciendo comentarios allí y aquí pero con absoluto anonimato (suerte que pasa desapercibida).
Hay bastante gente, podremos ser unas veinte personas, las cuales vamos tomando asiento y aunque el lugar no es muy grande, me siento bien, el Birlibirloque te invita a compartirlo, es acogedor.
Juan, el editor (benefactor que parece un enemigo que parece un amigo) de Páginas de Espuma hace una pequeña presentación (se vende bien) pero inmediatamente cede el testigo al verdadero presentador (en los actos públicos, individuo encargado de que el conferenciante hable) a Hipólito G. Muñoz escritor onubense y que nos demostró que conocía bastante bien a Andrés Neuman. A partir de esos momentos y durante más de una hora, fue imposible aburrirse, no prestar atención a las palabras (transformación de lo nombrado) ni a los datos que sobre el libro, autor y asuntos varios, nuestro maestro de ceremonia que con el cariño paso a llamarse Poli nos deleitaba. Creo que tod@s los que estábamos allí llegó un momento en que estábamos hermanados por la risa (calambre del alma. 2. Técnica de supervivencia. . Energía renovable) y por el gozo (placer más boquiabierto) que suponía asistir a una presentación tan original como esa.
Poli hablaba de lo difícil que suponía para él presentar un diccionario a la par que comentaba como conoció a Andrés y a través de esa línea fue haciendo hincapié en palabras que Neuman buscaba en su libro y nos recitaba (palabras escogidas con gran tino todo hay que admitir).
Llegado cierto momento y para que no decayera la intensidad (última vez de cada cosa) del acto y que era improbable, el bueno de Poli paso unos lápices de colores para que interactuáramos nosotros en la presentación realizando unas modificaciones a un libro (soledad plural. 2. Artilugio que cuesta quemar) que fue pasando.
Juan, Poli, Andrés |
Como todo tiene un final, este no pudo ser mejor, tal y como nos tiene acostumbrado la librería con cada presentación suya. Tomamos una copita de vino para poder prolongar un poco más el maravilloso acto.
En breve os traeré la reseña de este diccionario de Andrés Neuma, Barbarismos una obra para disfrutar y atesorar en casa como otra joya del lenguaje.
Gracias por la crónica. NO lo conocía.
ResponderEliminarNo conocía al autor ni el libro, así que gracias por compartir con nosotros la crónica
ResponderEliminarBesos
¡Qué pena no haber podido ir! Me encanta la crónica que has hecho incluyendo las definiciones de Andrés!!
ResponderEliminarNo he leído nada del autor, parece que lo pasaste en grande en ese acto y que te dio más de lo que esperabas, ahora a esperar a la reseña.
ResponderEliminarGracias por compartir esta interesante presentación! Hoy ví esta portada en mano de Mientrasleo y me llamó la atención, así que estaré atenta a vuestras reseñas ;)
ResponderEliminarBesos
A mí también me encantan las presentaciones, es un momento en el que conoces algos más que un libro y eso siempre es interesante.
ResponderEliminarUn saludo.
Muy buena crónica, dan ganas de conocer su obra. 1beso!
ResponderEliminarGracias por compartirlo... No es cualquier presentación, no ¡Neuman! Me voy anotando ya Barbarismo, y eso sin esperar tu reseña ;)
ResponderEliminarBesos
Nacimiento del "Diccionario colaborativo de redefiniciones" en el blog :
ResponderEliminarhlamuda.com