Encuentro con Javier Fernández Panadero sobre Como Einstein por su casa.

Encontramos a Javier Fernández Panadero  junto a una caja de herramientas y enfrascado en una lectura cualquiera. Acaba de bajarse del Ave procedente de Madrid para demostrar en Sevilla que la ciencia lo abarca todo y que nos rodea e interactuamos constantemente con ella  sin que nos demos cuenta. Como Einstein por su casa es su nuevo libro de divulgación científica, que ya os recomendé hace unos días aquí. Un libro donde aprenderemos muchas curiosidades y aspectos de la vida diaria, donde la ciencia juega un papel fundamental. Sigo pensando que el valor didáctico, divulgador y pedagógico de este libro es muy recomendable sobre todo para crear entre esos padres e hijos  una comunicación  a través de un vínculo que puede llegar a ser divertido como nos explica Javier y que no es otro que la ciencia.

De sonrisa eterna pero tranquila, Javier contagia entusiasmo por lo que hace y eso pude comprobarlo en directo cuando armado con unos cachivaches de andar por casa desplegó toda una serie de trucos caseros que camuflaban todo un sinfín de enseñanzas científicas en una demostración en la Feria del Libro de Sevilla. 

Su trayectoria le avala y por eso habla con franqueza cuando piensa que en las redes sociales hay mucha desinformación y hay que saber filtrar muy bien entre lo que podemos encontrar que es mucho y muy valioso. Por cierto nos recordó que no hay que olvidar hacer copias de seguridad de todos los archivos valiosos e importantes  que tengamos y yo ahora pondré a buen recaudo la conversación que tuvimos la mañana en que aprendí a afilar un cuchillo con la base de un plato de cerámica. 

Libros en el petate: Hay mucho miedo a acercarse a la ciencia. ¿Cuál crees qué es el motivo?

Javier Fernández Panadero: Pues que se percibe como difícil, aburrida, poco aplicable  y una disciplina áspera. En realidad es difícil como casi todas las cosas como por ejemplo bailar como Fred Astarie y no por ello la gente deja de bailar en las bodas y se lo pasa bien. Hay un nivel accesible en casi todas las disciplinas y en la ciencia también y  eso tratamos los divulgadores en la medida de lo posible y en este libro lo hago mucho más para que se vea que es aplicable a la vida cotidiana.

L.P: En el libro viene subrayado que es para todos.

J.F.P: Es para todos porque a veces tengo un público juvenil o infantil pero este libro va más enfocado al público adulto. A los que nunca les gustó y que pensaban que la ciencia no servía para nada. Con explicaciones muy sencillas, no demasiado profundas para que conozcas el principio y lo puedas aplicar.

L.P: Este libro lleva implícito una cierta experiencia porque este no es tu primer trabajo.

J.F.P: Este es mi séptimo libro y cubre a un sector más de la población porque muchas veces escribimos para la gente que le gusta la ciencia y predicamos a conversos como se suele decir. Aquí buscamos a ese sector de la población que dice que la ciencia no le aporta nada como usuario y he tomado ese desafío y he decidido enseñar cómo saber ciencia te puede sacar de algunos apuros o mejorar tu vida cotidiana  y con todo el cariño le decimos a esa persona; aquí tienes las utilidades que puedes encontrar sabiendo ciencia en tu vida cotidiana.

L.P: A mí gracias a tu libro he recordado que tengo que hacer copia de seguridad de todos los archivos que tengo en el móvil.

J.F.P: Precisamente el otro día tuve un momento emocionante con esto. Yo soy profesor de instituto y doy tecnología e informática y es algo en lo que insisto mucho a mis alumnos, en que hagan copias de seguridad de sus archivos. El otro día se acercó una alumna para darme las gracias porque había seguido mis consejos y gracias a eso no había perdido al estropearse su móvil una gran cantidad de fotos.

L.P: Hablas de tu labor como profesor. Yo te pregunto si quedan ganas de hacer esa labor docente literaria después de terminar de dar clase.

J.F.P: Contar cosas es una experiencia  emocionante pero cuando enseñas algo y haces que una persona de un paso adelante y se le abre una puerta que pensaba que estaba cerrada o le brillen los ojitos cuando entiende algo es una experiencia muy gratificante. Tener charlas con un público en general y ver como personas mayores te dicen “ojala te hubiera tenido a ti de profe de ciencias” es tremendo aunque reconozco que es una labor muy cansada.

L.P: Este libro no es un compendio de trucos, explica realmente como es la vida.

J.F.P: Siempre hay un peligro cuando uno divulga que es el peligro de vulgarizar. Simplificas tanto las cosas o las haces tan sencillas que a veces pierden su valor o las estas explicando de manera incorrecta. Siempre que acercas una disciplina a alguien tienes que simplificar porque yo que soy licenciado en Física no puedo hablar del átomo  con el público en general como hablo con mis compañeros de carrera. Yo creo que hay que lanzarse a romper eso y para ello se hace un poco de trampa en estos libros de divulgación porque al leer este libro te vas a reír, vas a aprender un montón de cosas pero el engaño es que cuando termines el libro has aprendido sin el dolor que supone una clase para entendidos.

L.P: Has tocado muchos temas en tus anteriores libros pero en este seguro que hay material para una segunda parte. Has llegado a planteártelo.

J.F.P: Siempre que te pones a escribir un libro y me pasó con el primero “Por qué el cielo es azul” llega un momento en que tienes que decir hasta aquí llegó y cierras en un número y por el camino se han quedado en el tintero trucos y experimentos que no han entrado pero en algún momento uno tiene que decir así quedó. Se puede hacer una segunda parte pero no es fácil encontrar trucos que puedan ser interesantes porque no valen todos por diversos motivos.

L.P: Como docente piensas que en el ámbito literario hacen falta más libros de divulgación como este.

J.F.P: Sí. Yo escribo porque creo que algo no se cuenta lo suficiente o no se cuenta de la manera que yo creo que debería contarse. Cada vez que te topas con situaciones donde ves situaciones de desconocimiento entre la gente, te das cuenta que hace falta seguir divulgando. Las plataformas y las maneras son muchas, blogueros, youtubers, profesores, etc. La respuesta si hace falta seguir divulgando es viendo si la gente en la calle tiene un nivel científico suficiente y en tanto que no hay que seguir.

L.P: Este libro demuestra que las soluciones a ciertos pequeños  problemas de la vida diaria son más fáciles de los que podríamos imaginarnos.

J.F.P: Yo creo que como todo cuando sabes. Todo lo que yo digo esta en internet pero hay que saber buscarlo, hay que saber encontrarlo, hay que darle sentido y hay que evitar todos los sitios de internet que tienen contenido erróneo. En internet esta cualquier respuesta a cualquier pregunta en cualquier vertiente pero hay que saber filtrar y tener conocimiento y saber ciertos principios  para saber cuál es la información correcta de todas las que se dan.

L.P: Y a eso le sumamos a que hay profesionales en el mismo ramo que se contradicen.

J.F.P: A veces confundimos la ciencia con los científicos. Los científicos son personas, a veces desactualizadas,  que muchas veces repiten lo que les contaron hace diez años y la ciencia evoluciona. El llamado que hacemos los divulgadores y los profesores de ciencias es la confianza en la ciencia no en los científicos.

L.P: Javier qué te cuesta más, elegir los temas o explicarlos para que se entiendan para todos.

J.F.P: Llevo más de veinte años en la docencia y la experiencia me ha hecho conseguir lograr un lenguaje sencillo, directo y con ideas muy concretas para que le gente me entienda.

L.P: En este libro la labor de pedagogía se nota mucho y hay ciertos temas en los que más que explicarlos, intentas concienciar a la gente en ciertas cuestiones.

J.F.P: Hay un capítulo que mucha gente me ha criticado y es el que lleva por título “Ve al médico”.  Piensan que no debería estar en el libro pero es un apartado que no pensé quitar nunca porque estamos en un mundo que a través de las redes sociales y otras formas nos manipulan y nos dicen que debemos de hacer para estar bien, que debemos de comprar, etc. Creo que eso ha llegado a la salud y hoy en día aceptamos consejos o remedios de cualquiera pero quien realmente es la persona idónea para asesorarnos es nuestro médico.

L.P: Me ha gustado mucho una particularidad que tiene este libro que son los códigos QR.

J.F.P: Es un trucho muy chulo que podemos usar todos porque todos llevamos un dispositivo conectado y muy potente que es el móvil. Yo puedo a través de ese código QR a contenido multimedia y a ampliaciones de información sobre ciertos temas para el que quiera ahondar mucho más en el tema explicado.  Lo uso mucho en mi quinto libro que se llama “Experimentos para entender el mundo” que era un libro lleno de experimentos y con cada uno de ellos había un código QR que te enlazaba a un video mío realizando el experimento.

L.P: Para terminar. Este libro es un poco cajón de sastre. Puedes definir un poco este Cómo Einstein por su casa

J.F.P: Si, es un poco cajón de sastre porque yo soy algo picaflor en la ciencia porque me gusta todo y aunque de formación yo soy físico e hice un posgrado en telecomunicaciones, siempre me ha gustado la biología. El libro es un conjunto de trucos caseros que bien te facilitan una labor cotidiana  (envasar cosas al vacío)  o bien te puede sacar de un apuro (sacar un coche del barro) explicando de esa manera como es la ciencia que va detrás de todas esas circunstancias, con la idea que queremos transmitir al público de que la ciencia explica cómo funciona el mundo y por eso funciona con la fuerza del mundo. Se van a divertir mucho y lo van a poder aplicar en su vida diaria.

L.P: Javier un verdadero placer y por supuesto me llevo otra buen puñado de buenas recomendaciones a parte de las que vienen en tu libro. Gracias por todo.

J.F.P: Gracias a ti.