Presentación libro de relatos El derbi final.


Mientras espero con impaciencia la hora de poder leer este libro os dejo la presentación de El derbi final, un libro que a modo de 28 relatos y un prologo, narra las andanzas desde todas las perspectivas de la rivalidad en torno a sus dos equipos de fútbol existente en la ciudad de Sevilla. Presente allí,  tengo que reconocer que asistí a un encuentro memorable, de los que hacen afición… por la literatura.


Sevilla, como ocurre con otras ciudades no escapa a la dualidad, pero con la salvedad de que aquí hay que utilizar la palabra “pura” dualidad para reflejar lo que simboliza vivir en la capital andaluza. El sevillano ya sea oriundo, criollo, nacionalizado o adoptado está acostumbrado a convivir y combeber en la calle, haciendo de una barra de bar, una terraza, una plazoleta o cualquier otro lugar que reúna ciertas características mínimas su foro, su púlpito para el discurso, el debate y la charla con los conocidos y amigos. El sevillano nació con el debate en las venas. El sano debate que degenera en pique aderezado con guasa que bien tratado crece hasta convertirse en pequeños derbis. Del Betis o del Sevilla, de Sevilla o Triana, de la Macarena o la Esperanza, del Silencio o del Gran Poder, De Matalascañas o de Chipiona, del Centro o de Sevilla Este, del Mercantil o del Labradores y así un largo etc. Todo sirve en esta ciudad para fomentar el intercambio de pareceres sobre quien se lleva el gato al agua.






Pero si hay un derbi que genera y desata pasiones, más que ningún otro hasta el punto de estar siempre en boca de todos es el futbolístico. Y gracias a estos derbis dialecticos que algunas veces discurren en torno a un café o una cerveza, partió la idea de un libro de relatos en el fragor de una tertulia de escritores. La idea era buena, o más bien muy buena, y poco a poco fue captando conocidos hasta el punto de tener una gran participación, un mecenas dispuesto a que se hiciera realidad y una ilusión enorme por verlo hecho realidad.
Con la puntualidad del que llega tarde, el pasado día 4 de Octubre tuvo lugar en la Fundación Cruzcampo, el primer acto oficial de la editorial El paseo tras su reciente creación. Un evento con muchas caras conocidas tanto del mundo del deporte como de la literatura sevillana.




Ofició el encuentro a modo de trencilla el ilustre José María Olmedo, director de grandes eventos de Heineken quien tras dar la bienvenida a todos los presentes cedió el micrófono a David González editor de El Paseo Editorial que se mostraba encantado de la acogida que los  medios y el  público en general habían tenido con este proyecto alabando la calidad de los relatos y de la categoría del plantel que los había elaborado. Un libro que les ha resultado enriquecedor y divertido de hacer, toda una teoría de las buenas ideas y que tras su conclusión les surgió la pregunta de por qué no se había hecho antes un libro como este.
Plantados en el centro del campo como capitanes de honor, dispuestos a poner el balón en juego contamos con la presencia de Joaquín Caparros, el que fuera entrenador del Sevilla F.C que rememoró sus primeros años en los que su familia le inculcó el sentimiento sevillista y como formaba parte de la idiosincrasia  de su vida. A su izquierda León Lasa hijo de una leyenda bética soñaba como capitán de la escuadra verdiblanca, con muchos derbis donde la afición conviviera junta disfrutando de jornadas de festividad colectiva como ocurre en otras ciudades y otros deportes.

Hecho el saque de honor, los dos entrenadores presentaron sus armas tácticas y su estilo de juego en dos tiempos con dos claros dominadores para cada uno de ellos. La primera parte fue un dominio absoluto para el conjunto del barrio de Nervión, donde su entrenador Manuel Machuca, explicó los orígenes de esta idea literaria creada una mañana de un Septiembre ya lejano en el tiempo. Con un juego vistoso, apelando al sentimiento y a la garra, dejó notas emotivas y ocasiones sintácticas para el recuerdo, desbordando en todo momento por los carriles de la poesía hecha discurso. Su centro del campo organizó un repertorio  emotivo que nos ganó incluso a los del equipo rival, porque a pesar de flirtear con la dureza de la ironía en algunos lances del partido, su discurso abogaba por una rivalidad siempre sana, ya que en el fondo, no deja de ser un libro que homenajea a los que hicieron sentir unos colores,y a esa afición sin la que todo esto no tendría sentido.


En la segunda  parte John Julius Reel se sacó la presión ejercida por su amigo Machuca con un juego alegre, de gambetas y rabonas humorísticas, llevando el arte y el salero yanqui a un césped imaginario, de un auditorio que comenzó tímidamente a sonreír con su discurso y que acabó a carcajadas y aplausos sin ningún pudor. A golpe de tiqui taca, fue recordando  uno a cada autor responsable de los relatos, dejando un grato recuerdo para cada uno de ellos con simpatía y buen humor. Y es que no sólo vimos a un yanqui hablando de fútbol, que aunque no entienda de este deporte del balón esférico si entiende de literatura y exaltó los textos que componen la obra, otorgándoles una gran calidad literaria. No debemos olvidar que  hasta cinco nacionalidades se han unido para dar forma a El derbi final, lo que hace dotar de una mayor diversidad cultural la obra.




Llegó la  conclusión y tras el pitido del colegiado que daba por finalizado el tiempo reglamentario de  la intervención de todos, el empate a ilusión por un libro que aspira a tener un lugar en las estanterías de muchos hogares, espera que cada lector decida qué equipo se lleva la victoria en el corazón de su lectura.

Robándole la terminología al rugby, tengo que decir que tras el encuentro, ambas aficiones tuvimos un tercer tiempo  donde degustamos de alguna cerveza que otra ofrecida por la Fundación Cruzcampo, donde pudimos conversar un rato y comentar las mejores jugadas teniendo el placer y el honor de compartir corrillo con escritores como Reyes Aguilar, Manuel Machuca, Paco Gallardo, Salvador Navarro.




6 comentarios:

  1. Ohh me lo perdiiii... Tuvo que estar bien.

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  2. Gracias por compartirlo que siempre es interesante aunque no sea mi tema.
    Besos

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  3. Para qué nos vamos a engañar: no soy parte del público objetivo de este libro. Aún así, muy interesante lo que has contado. 1beso!

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  4. Por lo que nos cuentas en la crónica, tiene toda la pinta de ser un derby literario entretenido. Estaré pendiente de lo que se vaya comentando sobre él. Un abrazo.

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  5. El futbol me gusta pero no creo que este libro sea para mi.
    Besitos

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